Oxigenoterapia peligros y monitorización

 Oxigenoterapia peligros y monitorización Como resultado del proceso del metabolismo del oxígeno, se producen radicales libres con gran capacidad para reaccionar químicamente con el tejido pulmonar. Estos radicales son tóxicos para las células del árbol traqueobronquial, así como también el alvéolo pulmonar.

 Oxigenoterapia peligros y monitorización

Como se explico anteriormente la Oxigenoterapia consiste en la introducción de oxigeno (O2) con fines terapéuticos a través de sistemas de administracion de oxigeno hasta llegar a la vía aerea, por lo general este tratamiento es bien tolerado, pero hay ciertos peligros asociados con la misma y que requieren de monitorización, algunos de estos peligros son:

Retención de CO2.

Esto puede suceder en pacientes que tienen un mecanismo defectuoso de la respuesta del ritmo respiratorio a los niveles de CO2 en términos de ventilación. Tratar a estos pacientes con oxígeno puede deprimir su respuesta a la hipoxia; esto a su vez puede empeorar la hipercapnia y llevar a una acidosis respiratoria con narcosis por retención de CO2.

Esta situación no ocurre cuando se usa oxigenoterapia con flujo limitado. En este caso, se mantiene el oxígeno a bajos niveles de manera que la presión parcial de oxígeno esté entre 60-­‐65 mm de mercurio.

Pueden ocurrir accidentes cuando se maneja o se guarda el oxígeno. Afortunadamente, esto sucede rara vez y puede prevenirse con un poco de sentido común. Los pacientes, sus familiares u otras personas que cuiden del paciente deben ser advertidas que no pueden fumar, porque este es el mayor peligro para provocar fuego o una explosión.

Sequedad de mucosas e irritación.

Se evita mediante la humidificación adecuada del oxígeno antes de su llegada a las vías respiratorias.

MONITORIZACIÓN DE LA OXIGENOTERAPIA

La pulsioximetría es la medición no invasiva del oxígeno trasportado por la hemoglobina en el interior de los vasos sanguíneos. Se realiza con un aparato llamado pulsioxímetro o saturómetro.

El pulsioxímetro mide la saturación de oxígeno en los tejidos, tiene un transductor con dos piezas, un emisor de luz y un fotodetector, generalmente en forma de pinza y que se suele colocar en el dedo, después se espera recibir la información en la pantalla: la saturación de oxígeno, frecuencia cardíaca y curva de pulso (en caso de monitorización: pletismografía).

El pulsioxímetro emite un foco de luz y capta la que pasa a través del lecho ungueal o el lóbulo de la oreja, de manera que, según sean las longitudes de onda absorbidas, es posible conocer el porcentaje de oxígeno que contiene la hemoglobina.

OXIMETROS

 

Este tipo de aparatos no reemplazan a los análisis de la gasometría arterial, pero constituyen una alternativa muy extendida, pues además de no ser invasivos, los pulsioxímetros son menos costosos y más convenientes que los análisis de gasometría arterial, y bastante más exactos que la valoración visual. Los aparatos disponibles en la actualidad son muy fiables para valores entre el 80 y el 100%, pero su fiabilidad disminuye por debajo de estas cifras.

RELACION DE SATURACION DE OXIGENO

Las situaciones que pueden dar lugar a lecturas erróneas son:

  1. Anemia severa: la hemoglobina debe ser inferior a 5 mg/dl para causar lecturas falsas.
  2. Interferencias con otros aparatos eléctricos.
  3. El movimiento: los movimientos del transductor, que se suele colocar en un dedo de la mano, afecta a la fiabilidad (por ejemplo, el temblor o vibración de las ambulancias), se soluciona colocándolo en el lóbulo de la oreja o en el dedo del pie o fijándolo con esparadrapo.
  4. Contrastes intravenosos, pueden interferir si absorben luz de una longitud de onda similar a la de la hemoglobina.
  5. Luz ambiental intensa: xenón, infrarrojos, fluorescentes… Se puede colocar un objeto opaco (una sábana) entre la fuente de luz y el aparato.
  6. Mala perfusión periférica por frío ambiental, disminución de temperatura corporal, hipotensión, vasoconstricción. Es la causa más frecuente de error ya; el pulsioxímetro requiere un flujo pulsátil para su lectura, por tanto, si el pulso es muy débil, puede que no se detecte. Puede ser mejorada con calor, masajes, terapia local vasodilatadora, quitando la ropa ajustada, no colocar el manguito de la tensión en el mismo lado que el transductor.
  7. Aunque se ha considerado uno de los factores de confusión, valores de hasta 20mgr/ml de bilirrubina en sangre no interfieren con la lectura.
  8. El pulso venoso: fallo cardíaco derecho o insuficiencia tricuspídea. El aumento del pulso venoso puede artefactar la lectura, se debe colocar el dispositivo por encima del corazón.
  9. Fístula arteriovenosa: no hay diferencia salvo que la fístula produzca isquemia distal.
  10. La hemoglobina fetal no interfiere.
  11. Obstáculos a la absorción de la luz: laca de uñas (retirar con acetona), pigmentación de la piel (utilizar el 5° dedo o el lóbulo de la oreja).
  12. Dishemoglobinemias: la carboxihemoglobina (intoxicación por monóxido de carbono) y la metahemoglobina absorben longitudes de onda similares a la oxihemoglobina. Para estas situaciones son necesarios otros dispositivos como CO oxímetros

 


 

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Referencias:

  • Casanova M, Hernández M, Medina G. Manual de Neumología y Cirugía Torácica. Madrid: Editorial Médicos, 1998:567-77.
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  • Bailey M, Ferguson G, Higgings M. Strategies in preserving lung health and preventing CPOD and associated diseases. Chest 1998;113:1255-95.
  • Mosquera J. Oxigenoterapia. Cuándo, cuánto y cómo. Rev Clin Esp 1994;194:128-33.
  • Estopá R. La oxigenoterapia continua. Arch Bronconeumol 1988;3:126-7.
  • Sánchez J. La oxigenoterapia en los enfermos pulmonares crónicos. Arch Bronconeumol 1988;3:123-5.
  • Isselbacher K. Principios de Medicina Interna de Harrison. 18 ed. Madrid: Interamericana, 1994;t 1:1383.

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